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siente como los movimientos de la respiración cambian la presión de tu cuerpo contra la superficie de lo que hay por debajo
25 | 06 | 2015
Siente lo que hay por debajo de tu cuerpo, tu cama, una silla, el suelo… A medida que vas respirando, siente como los movimientos de la respiración cambian la presión de tu cuerpo contra la superficie de lo que hay por debajo de él. La espiración es un movimiento de relajación. Todos los músculos que hicieron el trabajo de inspirar, durante la espiración, se relajan. Concédete tiempo para sentir esta relajación, que tienen lugar en el nivel involuntario, y cultívala. Descansas hacia el interior, lo más hondo del ser vivo que eres, y hacia el suelo, tu base de apoyo en el mundo material del cual formas parte. Al final de la espiración, toma un momento para desfrutar de la relación entre lo más hondo del ser vivo que eres y el mundo material del cual formas parte.
Cuando sientas que tu cuerpo necesita más aire, simplemente ábrete y deja que fluya hacia dentro. Observarás que el movimiento de la inspiración empezará en ese lugar profundo en el interior del ser vivo que eres. A menudo hay mucha tensión en este lugar, tensión involuntaria, que no puedes relajar simplemente. Si encuentras esta clase de tensión cuando, en principio, se supone que es el momento de descansar hacia dentro siguiendo a dirección natural de movimiento de espirar, dibuja una línea imaginaria entre la tensión y el suelo. De este modo enseñas al lugar tenso donde existe una oportunidad para encontrar apoyo.
Cuando la inspiración empieza en este lugar profundo, siente cómo expande lo tenso y apretado, aunque sólo sea un poquito. Date tiempo para que el aire que entra pueda expandir también el resto de tu cuerpo. Cuando tienes suficiente, simplemente suéltalo de nuevo. No retengas el aire. Siente cómo esta vez puedes descansar un poquito más en ese lugar. De este modo, respiración a respiración, ganas espacio, libertad de movimiento y capacidad de responder y la tensión se suelta un poco cada vez. Con este movimiento nutres y acaricias los lugares en tu cuerpo y psique que duelen o están heridos, todas las partes que necesitan una atención amorosa para recuperarse y curarse.
Junto con el aire que espiras, deja salir cualquier cosa desagradable, cualquier sensación o sentimiento que no te gusta, cualquier exceso de intensidad o carga emocional y entrégaselo a los campos de fuerza mayor que te rodean. Con el aire nuevo que inspiras, nutre to ser interior con nueva energía y movimiento para ayudarte a cambiar lo que necesita cambiar y curar lo que necesita curarse.
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